Mundo Ferroviario

Conociendo las Estaciones de Tren Alrededor del Mundo

HUNGERBURGBAHN, AUSTRIA

Por Paola Castro

Cuando pensamos en ferrocarriles, lo primero que suele venir a la mente es grande, pesado y ruidoso, al menos en México esa es la idea que por muchos años las personas han pensado al escuchar sobre el sector ferroviario. Si bien, existen trenes grandes, pesados y ruidosos, pero en muchos casos estos se dedican a transportar materias primas o productos en cantidades muy grandes. Sin embargo, cuando se trata de transportar a personas, su infraestructura es diferente, vemos desde el tren que cuenta con muchos vagones con esas características no muy favorables para los que tienen el sueño ligero, hasta el que parece 3 carros unidos y que a su pasar ni cuenta te das. Poco a poco esta idea se va saliendo de nuestra mente, además de ver otros ejemplos de ferrocarriles en el extanjero que pueden servir de inspiración para diseños y funcionalidad. 

 

En esta ocasión, en Conociendo las Estaciones del Tren alrededor del Mundo, hablaremos de la estación de Hungerburg en Austria, que sin duda es el claro ejemplo de innovación, arte arquitectónico y funcionalidad en el transporte ferroviario. 

 

La ciudad de Hungerburg es un distrito de Innsbruck en Austria, caracterizado por estar rodeado de montañas que en temporadas de invierno se pintan de blanco total. Debido a su región geográfica, se buscó la manera de poder conectar parte de la ciudad a los cuales era difícil y complicado moverse para sus habitantes. 

El Hungerburgbahn es un funicular; un tipo especial de ferrocarril utilizado y construido con el fin de subir grandes pendientes. Este funicular conecta el casco antiguo de Innsbruck con Hungerburg.

 

Creada en 1906, su primera estación está situada en el valle de la ciudad de Hungerburg a una altura de 569 msnm, mientras que la estación situada en la cima de la montaña, se encuentra a una altura de 857 msnm. 

Consta de solo 20 minutos para que desde el centro de la ciudad puedan trasladarse a la montaña de la capital de Tirol, asegurando un ascenso y descenso de habitantes y visitantes de manera segura, rápida y cómoda.

 

 

Pese a que originalmente su construcción fue en 1906, el tema de reconstruirlo con nuevas plataformas y mayor calidad en los materiales para garantizar una experiencia más reconfortante para los usuarios, no fue hasta 2007 que luego de 2 años de construcción, el renovado Hungerburgbahn abrió sus puertas con cambios pero con el mismo objetivo; ser funcional para los habitantes y el turismo. 

 

Su ruta comienza desde la estación de metro Congress en el casco antiguo de Innsbruck. Desde allí, los trenes pasan la estación Löwenhaus y Alpenzoo antes de llegar a la estación de Hungerburg a 857 metros (2.811 pies). En la estación de Hungerburg, el funicular conecta con el teleférico de Nordpark (Nordkettenbahnen) y los visitantes pueden continuar en uno de los dos teleféricos: hasta la cima de Seegrube, de 1.905 metros (6.250 pies) o 2.300 metros (7.546 pies) cumbre de Hafelekar, parte del Parque Natural Karwendel.

 

El nuevo Hungerbahn es obra de la famosa arquitecta Zaha Hadid, quien ya había participado en un proyecto en Innsbruck, y que finalmente, fue elegida por medio de un concurso que implicaba trabajar en el proyecto de la renovación del funicular. 

Cada una de las estaciones construidas como esculturas de hielo de enormes dimensiones que visten un paisaje artificial que asemeja movimientos y circulaciones con cubierta ligeras construidas con vidrio de doble curvatura flotando sobre un basamento de hormigón. 

De acuerdo con un comunicado de prensa por parte de Nordkette, el proyecto fue financiado e implementado como una asociación público-privada entre la ciudad de Innsbruck, STRABAG y Leitner AG

 

Cada vagón del funicular consta de cinco compartimentos de pasajeros suspendidos en una misma base, cuya inclinación permite estar de pie, subir y bajar de compartimentos horizontales en los puntos de parada tanto en el nivel como en la pendiente de la ladera de la montaña. Su capacidad es de 130 personas, por hora y dirección puede llegar a transportar 1200 personas, aproximadamente 40,000 pasajeros al mes. 

El tren es utilizado por el tráfico urbano, sin embargo, en su mayoría quienes lo utilizan son  los usuarios turistas debido a su funcionalidad para subir a la montaña, arquitectura atractiva y fuera de lo común, y sobre todo, una forma de disfrutar de la belleza del paisaje que alberga la ciudad de  Innsbruck. 

 

 

 

Paola Castro 

Licenciada en Comunicación por la UNAM. Redacción de Mundo Ferroviario. 

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